jueves, 15 de abril de 2010

PARA QUE SIRVE HOY LA MASONERIA?


En un mundo como éste de comienzos del siglo XXI, en el que han quedado derrumbadas las grandes utopías de los siglos XIX y XX, nacidas del espíritu de la Ilustración; en el que los fanatismos y la intolerancia más extrema marcan el presente de la humanidad; en el que las religiones y los sectores políticos más conservadores se muestran aliados en una especie de gran contra-revolución que quiere anular las libertades individuales y los progresos sociales conseguidos en los últimos doscientos años; en el que decenas de millones de hombres y mujeres viven bajo la incertidumbre y el miedo, y centenares de millones sufren condiciones inaceptables de vida; en un tiempo preñado de amenazas, donde el desafío más importante es la propia supervivencia del planeta y de la raza humana, la Masonería puede ofrecer hoy, con tanta fuerza y vigor como lo hizo en el pasado, una respuesta de carácter esencial, porque sus fundamentos y sus símbolos tienen un carácter universal, en un mundo llamado global, pero al que le faltan los símbolos de la integración que tienen la capacidad de liberar a los seres humanos de sus vicios y miserias, haciéndoles tomar conciencia de los elementos primordiales de la vida humana y del universo, y llevándoles a buscar la paz y la armonía, como supremo deseo colectivo.Y así, la Masonería hoy sirve, al igual que en otras épocas, para formar masones es decir hombres que no permanecen indiferentes ante los enigmas de la vida y de la existencia, que quieren mejorar moral e intelectualmente junto a otras personas, mediante ritos nacidos de la alegoría y los símbolos de los antigüos gremios de la construcción, los cuales permiten aprender a pensar de tal forma que, profundizando en los conceptos de Libertad, Igualdad y Fraternidad, crean unos lazos de confianza entre ellos, que les ayudan a buscar su excelencia, lo que redunda en hacer mejor la sociedad que les rodea, manteniendo, al tiempo, una tradición iniciática, que al tomar como fundamento las verdades y conocimientos primigenios del ser humano, y virtudes como la tolerancia, logran que éste desarrolle sus facultades sin manipulaciones ni prejuicios.
R:.H:.Javier Otaola Bajeneta,
R:. L:. S:. Manuel Iradier Nº 26, del Or:. de Vitoria-Gasteiz
España.