viernes, 8 de mayo de 2009

PIENSO, LUEGO EXISTO

René Descartes en la primera parte de su “Discurso del Método” publicada en 1637 escribió en latín “Cogito ergo sum” que traducida se resume como “Pienso, luego existo” quizás la frase más celebre que resume toda su posición intelectual, es tan solo una de las tantas contribuciones que le heredó a la filosofía expresando que la única forma de encontrar la verdad es en uno mismo.
Descartes es un personaje conocido por sus muchas aportaciones a las matemáticas, a la física y, muy en especial, a la filosofía. De hecho, es considerado el Padre de la Filosofía Moderna. Y eso se debe a que le dió importancia a los temas intrínsecos, como por ejemplo la moral.
¿Que quiere decir esta frase? ¿Por que sería tan celebre? ¿Por qué hay quienes adoptan esta frase para expresarse? Primero que nada, se debe entender que todos somos diferentes, y por eso, todos vemos las cosas con un punto de vista diferente, de acuerdo a nuestra escala de valores. Sin embargo, estas palabras, tienen algo muy especial. Por más que uno deba meditar en su significado, todos tenemos una idea similar y particular de lo que significa.
Piensa: Una vez que hayas pensado te habrás integrado con tu mente. Entonces, empezarás a existir, porque utilizas tu mente para definir los pensamientos, que de una u otra forma, llegan a regir tu forma de ser, tu forma de pensar, tu misma persona. Entonces serás capaz de, lentamente, aprender de todo lo que te rodea y llegar a ser alguien a quien un ser ajeno a ti, podrá notar y reconocer como ser humano.
Nuestro razonamiento es la fuente de la vida, sin la razón el humano no sería el centro de función del universo.
Porque pienso, yo puedo lograr hacer las cosas diferentes. Porque pienso, puedo hacer obras que pasarán con gran trascendencia hacia la inmortalidad; independientemente de si es una acción positiva o negativa o puedo quizás hacer nada fuera de lo común. Aun así, sin haber logrado trascender, seguiré existiendo. ¿Por que? Porque pensé.
Si nuestros pensamientos determinan nuestro existir, entonces,¿en que estamos pensando?
Si somos capaces de respondernos honestamente esta pregunta, entonces debemos felicitarnos, de alguna manera pues estamos conectados con nuestro interior y con esa fuerza podemos existir.