Pertenezco a una raza sentimental,
a una patria fatigada por sus
penas,
a una tierra cuyas flores culminan
al anochecer,
pero amo mis desventuras,
tengo mi orgullo, doy vivas a la
vida bajo este cielo mortal
y soy como una nave que avanza
hacia una isla de fuego.
Pertenezco a muchas gentes y soy
libre,
me levanto como el alba desde las
últimas tinieblas,
doy luz a un vasto campo de
silencio y oros,
sol nuevo, nueva dicha, aparición
imperiosa
que cae horas después en un lecho
de pesadillas.
Escribo, como ven, y corro por las
calles,
protesto y arrastro los grillos del
descontento
que a veces son alas en los pies,
plumas al viento que surcan un azul
oscuro,
pero puedo quedarme quieto, puedo
renunciar,
puedo tener como cualquiera un
miedo terrible,
porque cometo errores y el aire me
falta
como me faltan el pecado, el pan,
la risa, tantas cosas.
El tiempo es implacable como un
número creciente
y comprendo que se suma en mi
frente, en mis manos,
en mis hombros, como un fardo,
y pertenezco al tiempo, a los
documentos, a mi raza y mi país,
y cuando lo digo en el papel,
cuando lo confieso,
tengo ganas de que todos lo sepan y
lloren conmigo.
Sebastian Salazar Bondy (1924 - 1965) poeta, crítico literario, narrador, periodista y dramaturgo peruano. Miembro de la llamada Generacion del 50 . El poema "Confidencias en alta voz" pertenece al Poemario Vida y Palabra publicado en Lima en 1960.