En la masonería coexisten dos niveles: el exotérico y el esotérico, la masonería exotérica corresponde a su dimensión externa, superficial y visible, mientras que la masonería esotérica contiene una enseñanza especial a la que muchos estamos llamados para su comprensión y que pocos masones la comprenden.
Los diferentes ritos dentro de la masonería se separan en sus formulaciones exotéricas, condicionadas por aspectos externos, pero la masonería superior se une en todos los ritos en su mensaje oculto y esotérico, interior y esencial, puramente objetivo, formulación evidente de una formulación de la verdad pura.
De ahí su carácter secreto: no es que alguien haya decidido ocultar deliberadamente la parte más poderosa e importante de la masonería a la mayoría de los masones; lo que ocurre es que tal verdad no se puede captar ni comunicar de manera meramente conceptual, sino únicamente a través de una experiencia personal que requiere no sólo de una alta cualidad de percepción en el sujeto, sino también un duro esfuerzo por su parte bajo la guía de un masón que este experimentado en el arte secreto de la masonería.
El Esoterismo Masónico descansa en tres realidades claves: la iniciación dentro del primer grado, el aumento de salario en el segundo grado y la exaltación en el tercer grado.
Pero lo paradójico de este asunto es: sin preparación esotérica no hay iniciación, y sin iniciación no hay esoterismo. Toda la organización masónica es eminentemente iniciática; toda la doctrina esotérica masónica se transmite y conserva a través de una larga cadena iniciática que reúne a cuantos participan en la unidad de esa dimensión profunda e invisible de la verdad.
Por asombroso que parezca para muchos estudiosos del esoterismo, la masonería sigue siendo la vía suprema iniciática del mundo, pues recoge una doctrina y unas técnicas que han pasado directamente, de maestro a discípulo desde tiempos inmemoriales, y es la masonería la fuente de donde han surgido muchos otros movimientos esotéricos y religiosos.
La iniciación masónica es por excelencia el procedimiento o rito mediante el cual un individuo entra a formar parte de esa cadena humana que tiene encomendada la transmisión de un solo concepto milenario, que es la posibilidad de que este individuo algún día comprenda su naturaleza divina. Gracias al rito iniciático, este sujeto da un primer paso hacia los misterios más sagrados a los que no tendrán nunca acceso el común de los mortales; inicia su andadura por el sendero hacia una meta suprema, que no es otra que liberarse de lo mundano.
R:.H:.Orlando Gonzalez
Respetable Logia Simbólica"San Juan 2000" Nº 197.
Or:. Venezuela
Los diferentes ritos dentro de la masonería se separan en sus formulaciones exotéricas, condicionadas por aspectos externos, pero la masonería superior se une en todos los ritos en su mensaje oculto y esotérico, interior y esencial, puramente objetivo, formulación evidente de una formulación de la verdad pura.
De ahí su carácter secreto: no es que alguien haya decidido ocultar deliberadamente la parte más poderosa e importante de la masonería a la mayoría de los masones; lo que ocurre es que tal verdad no se puede captar ni comunicar de manera meramente conceptual, sino únicamente a través de una experiencia personal que requiere no sólo de una alta cualidad de percepción en el sujeto, sino también un duro esfuerzo por su parte bajo la guía de un masón que este experimentado en el arte secreto de la masonería.
El Esoterismo Masónico descansa en tres realidades claves: la iniciación dentro del primer grado, el aumento de salario en el segundo grado y la exaltación en el tercer grado.
Pero lo paradójico de este asunto es: sin preparación esotérica no hay iniciación, y sin iniciación no hay esoterismo. Toda la organización masónica es eminentemente iniciática; toda la doctrina esotérica masónica se transmite y conserva a través de una larga cadena iniciática que reúne a cuantos participan en la unidad de esa dimensión profunda e invisible de la verdad.
Por asombroso que parezca para muchos estudiosos del esoterismo, la masonería sigue siendo la vía suprema iniciática del mundo, pues recoge una doctrina y unas técnicas que han pasado directamente, de maestro a discípulo desde tiempos inmemoriales, y es la masonería la fuente de donde han surgido muchos otros movimientos esotéricos y religiosos.
La iniciación masónica es por excelencia el procedimiento o rito mediante el cual un individuo entra a formar parte de esa cadena humana que tiene encomendada la transmisión de un solo concepto milenario, que es la posibilidad de que este individuo algún día comprenda su naturaleza divina. Gracias al rito iniciático, este sujeto da un primer paso hacia los misterios más sagrados a los que no tendrán nunca acceso el común de los mortales; inicia su andadura por el sendero hacia una meta suprema, que no es otra que liberarse de lo mundano.
R:.H:.Orlando Gonzalez
Respetable Logia Simbólica"San Juan 2000" Nº 197.
Or:. Venezuela
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