Los Masones siempre han sido considerados personas que han superado sus pasiones terrenales despojados de toda envidia, ira, prepotencia, egoísmo, apegos personales, resentimiento en contra de los Hermanos, la superación intelectual y espiritual debe predominar en los Templos pero vemos con tristeza que todavía algunos Hermanos no hemos alcanzado esa etapa de PULIR LA PIEDRA BRUTA, eso se debe al rápido proceso que existe entre un grado y otro no alcanzando así el conocimiento pleno de cada grado y el conocimiento no esta en función a dominar el ritual o saber de memoria los títulos de las obras, ESTA EN SABER INTEPRETAR EL CONTENIDO DE CADA TEMA PARA APLICAR EN LA VIDA DIARIA de nosotros mismos, como ejemplo dentro de la sociedad. Debe fomentarse los principios de humildad, tolerancia, convivencia, respeto, que se debe tener con todos los Hermanos. “El Ritual masónico no es una ceremonia, sino una vida que vivir.”(Manly Hall). El Franc-masón comprueba también que las jerarquías con las que él colabora y le han transmitido los Hermanos mayores, en diferentes grados, los místicos rituales espirituales de todas las Escuelas del pasado, y que si se arriesga a ocupar un puesto, no debe entrar a este sagrado estudio teniendo en vista lo que pueda sacar de él, sino en lo que puede ser útil en la expansión de esta trascendental labor (1), pues todavía existen Franc-masones que cuando ocupan cargos dentro de las Logias hacen de las mismas un castillo feudal de la ignorancia esotérica. Un Franc-masón no es el producto de un nombramiento; es un evolucionado, y debe darse cuenta de que el lugar que ocupa en la Logia Exotérica no significa nada en comparación con su puesto en la Logia Espiritual de la existencia. Debe descartar, para siempre, la idea de que puede ser instruido en los Misterios sagrados (o que le pueden ser comunicados oralmente); o que el ser miembro de una organización basta para mejorarlo en todo aspecto. Debe comprender que su deber consiste en construir y desarrollar las trascendentales enseñanzas en su propio ser: que nada, salvo su propio ser purificado, puede abrirle la puerta de los impenetrables arcanos de la conciencia humana (2)
La Franc-masonería es una filosofía esencialmente sin dogma. Por eso es más verdadera. Sus componentes se inclinan ante la verdad sin mirar quien es portador de ella; sirven a la luz, en vez de preocuparse del que la trae. En su camino, prueban que se hallan afanados en conocer mejor la voluntad y los dictados del Creador. No existe institución más verdadera que ésta de la fraternidad mundial, de la hermandad, de la solidaridad y la unión en el propósito de glorificar a un Dios universal y edificar para Él un templo de actitud constructiva y de carácter noble, en el propio corazón de cada uno de sus componentes. (3)
La Francmasonería no es una cosa material; es una ciencia del alma. No es un credo o una doctrina, sino una expresión universal de sapiente trascendencia.
Es hora ya, de acabar la informalidad y vulneración de principios y procesos que mucho cuesta mantener dentro las Logias y sobre todo la buena convivencia entre Hermanos pues tiene que predominar la FRATERNIDAD, LIBERTAD e IGUALDAD y despojarse de Egoismos e Intereses personales. Además todo Hermano que de por si actuare como mercenario en contra de otro Hermano de la Logia u otra Logia no debe considerarse Masón pues rompe la regla básica de la Masonería y rompe su juramento frente al Volumen de la Ley Sagrada que hizo al ingresar a la Logia.
(1)(2)(3) Las claves Perdidas de la Francmasoneria – Manly Hall
ROMMEL CHAVEZ M.
M.·.M.·.
La Franc-masonería es una filosofía esencialmente sin dogma. Por eso es más verdadera. Sus componentes se inclinan ante la verdad sin mirar quien es portador de ella; sirven a la luz, en vez de preocuparse del que la trae. En su camino, prueban que se hallan afanados en conocer mejor la voluntad y los dictados del Creador. No existe institución más verdadera que ésta de la fraternidad mundial, de la hermandad, de la solidaridad y la unión en el propósito de glorificar a un Dios universal y edificar para Él un templo de actitud constructiva y de carácter noble, en el propio corazón de cada uno de sus componentes. (3)
La Francmasonería no es una cosa material; es una ciencia del alma. No es un credo o una doctrina, sino una expresión universal de sapiente trascendencia.
Es hora ya, de acabar la informalidad y vulneración de principios y procesos que mucho cuesta mantener dentro las Logias y sobre todo la buena convivencia entre Hermanos pues tiene que predominar la FRATERNIDAD, LIBERTAD e IGUALDAD y despojarse de Egoismos e Intereses personales. Además todo Hermano que de por si actuare como mercenario en contra de otro Hermano de la Logia u otra Logia no debe considerarse Masón pues rompe la regla básica de la Masonería y rompe su juramento frente al Volumen de la Ley Sagrada que hizo al ingresar a la Logia.
(1)(2)(3) Las claves Perdidas de la Francmasoneria – Manly Hall
ROMMEL CHAVEZ M.
M.·.M.·.