sábado, 29 de enero de 2011

EL JURAMENTO Y LA LUZ


Se concibe por juramento a la manifestación de contraer y dar cumplimiento a una obligación o compromiso, palabra derivada del latín “Juramentum” o “Jurf” que significan aceptación o negación; la profunda relevancia del juramento masónico radica esencialmente en que de forma absolutamente voluntaria e independiente, motivado por las mas elevadas y sublimes aspiraciones del ser, libre y espontáneamente, el caballero profano afirma su intención de desempeñar fielmente las obligaciones morales, espirituales y materiales, que como hombre y ser racional tiene para consigo mismo, sus semejantes y las que debe al ser supremo; este acto solemne se constituye como una acción trascendente en su existir, debido a que es la concreción de que se le ha permitido ser parte de una institución que fundamentada en sus doctrinas y principios instruye a sus miembros para actuar guiados por la mas alta moral, obedeciendo a la ciencia y la razón. Un juramento edificado y sostenido, en el ideal, nos hace entender la fortaleza y el desarrollo de nuestra orden, en su loable tarea, en el se apela a la moral como garante de reserva, discreción o secreto de cuanto le sea revelado, a su vez evoca el respeto por las opiniones y creencias de nuestros semejantes, en esencia, es por estas máximas que el profano fiel a su Patria, al honor, a la justicia, asume el compromiso de cumplir con los elevados postulados de la institución, de amar profundamente y fraternalmente a sus hermanos, lo que se traduce en un desempeño bañado en rectitud dentro de su vida en la sociedad. En lo concerniente a la Luz, es importante acotar, que etimológicamente es una palabra derivada del latin “Lux” o “Lucem” que indica la claridad que hace visible todas las cosas; en el ritual simbólico de la iniciación Masónica el hecho de descubrir al profano ante la luz del taller, representa su nacimiento y evoca su disposición conciente a cultivar el conocimiento, su apertura al entendimiento humano; la luz se asume como emblema de la inteligencia y capacidad del hombre de estudiar, comprender e interpretar las ciencias. A la voz de hágase la luz, ante la amenazante presencia de los aceros, el profano es recibido en una institución dedicada al estudio de las ciencias y la práctica de las virtudes, como aspectos fundamentales de su razón de ser y obra para con la humanidad, lo que refleja, sin duda alguna, su orientación altruista y humanista. En conclusión el haber prestado el Juramento Masónico nos ha permitido aproximarnos a comprender en su magnitud y significación, el sacrificio de aquellos hombres que han dado todo de si, en aras de construir una mejor humanidad, con el, hemos entendido los esfuerzos de Miranda y Bolívar, solo por mencionar algunos, como también a nuestros QQ:. HH:., quienes con constancia y abnegación contribuyen en nuestra formación y asumimos responsablemente la tarea ineludible de cultivar la Luz, por llamar así a las ciencias, al arte, la verdad y a la razón, que son los únicos elementos, que nos permitirán hacernos verdaderos Masones, que con sus hechos tributen esfuerzos en aras de que se construya una justa humanidad.

Q:.H:. Kendrick Figueredo Guzmán
Log:. Sol de Miranda N° 204