
Una palabra amable:puede suavizar las cosas.
Una palabra alegre:puede iluminar el día.
Una palabra oportuna:puede aliviar la carga.
Una palabra de amor:puede curar y dar felicidad.
Una palabra alegre:puede iluminar el día.
Una palabra oportuna:puede aliviar la carga.
Una palabra de amor:puede curar y dar felicidad.
Una palabra irresponsable:puede encender discordias.
Una palabra cruel:puede arruinar una vida.
Una palabra de resentimiento:puede causar odio.
Una palabra brutal:puede herir o matar.
¡Las palabras estan vivas!¨
¡Bendicen o maldicen, alientan o abaten, salvan o condenan!
Si todas nuestras palabras son amables,
los ecos que escucharemos también lo serán.
Habla de tal manera que en tu alma y en la de los demás quede la Paz.
Cuida tus palabras, ellas tienen poder.
Que no salga de tu boca una palabra que pueda causar daño.